El Sindicato de Trabajadoras/es de la Enseñanza de Aragón (STEA) ha anunciado hoy que recurrirá ante los tribunales el acuerdo sobre condiciones laborales y salariales suscrito el pasado mes de mayo entre el Gobierno PP-Vox de Jorge Azcón y los sindicatos CSIF, CCOO y UGT. Para STEA, “es lesivo en algunos aspectos para los trabajadores y supone un claro retroceso con respecto al de noviembre de 2022 que apoyamos todas las fuerzas sindicales, y que el actual Ejecutivo se ha negado en redondo a desarrollar”.
Con este procedimiento judicial, STEA confía en que se pueda paralizar la aplicación del reciente acuerdo suscrito en Mesa Sectorial el pasado 10 de mayo ya que, a su juicio, “mantiene más horas lectivas que el acuerdo de 2022, plantea un falso e insuficiente aumento salarial que se retrasa hasta 2026, con una plantilla de docentes más reducida y una merma general en la calidad de la enseñanza en Aragón”.
Por ello, STEA propugna retomar y cumplir el acuerdo que alcanzaron por unanimidad todas las fuerzas sindicales presentes en la Mesa Sectorial con el anterior Gobierno PSOE-CHA-Podemos-PAR de Javier Lambán en 2022, publicado en el Boletín Oficial de Aragón en junio de 2023.
STEA entiende que conforme a lo dispuesto en el artículo 38 del Estatuto Básico del Empleado Público no concurren circunstancias que justifiquen su incumplimiento por la Administración aduciendo “causa grave de interés público derivada de una alteración sustancial de las circunstancias económicas”. Algo que en cualquier caso no se ha comunicado formalmente a los sindicatos firmantes del acuerdo publicado oficialmente el pasado año.
“LA DGA HA QUERIDO CANJEAR HORAS POR SALARIO”
En este sentido, STEA defiende la vigencia de ese pacto. “Se firmó con la Administración, no con un partido político, en consecuencia compromete también a la nueva Administración, con independencia de su nuevo color político”. El sindicato habría visto positivo, tomando como base el acuerdo de 21 de noviembre de 2022 sobre reducción de horas lectivas, mejorar el mismo con incrementos salariales reales, pero no llevando a cabo una negociación desde cero, donde el Departamento de Educación ha pretendido “canjear horas por salario y el resultado final es muy poco satisfactorio“.
Sobre las retribuciones, STEA advierte que “se está vendiendo un falso aumento salarial del 4,5%”. Sin embargo, “la realidad es que se va a ejecutar en dos tramos, no va a ser una subida única, y se tiene que determinar todavía en la Comisión de Seguimiento del acuerdo el modo concreto”. En todo caso, advierte este sindicato, la subida se aplicaría en el año 2026 y 2027, “el último año de legislatura, por lo que los docentes aragoneses seguirán estando bastantes años más entre los peor pagados de España”.
STEA recuerda que la inflación prevista para esos dos años alcanza el 5,6 %, frente a una subida del 4,5 %, además de tener que sumar el IPC de 2024 y 2025, donde no se producirá una subida adicional al profesorado aragonés sobre lo establecido por el Gobierno central.
Además “se anuncia como una subida del 7% el salario de los miembros de los equipos directivos, cuando solo es de los complementos, no del sueldo base y sin fecha”. Por otro lado, el reconocimiento económico de las tutorías es muy bajo y llegará apenas a los 36 euros al mes, “cantidad ínfima teniendo en cuenta la enorme cantidad de trabajo”.
Con el acuerdo de hace casi dos años, las horas lectivas semanales se reducían este curso de 24 en Primaria y 19 en Secundaria a 23 y 18, respectivamente. Y el próximo año escolar pasaban a ser 23 y 18. Según lo pactado este año, las 18 horas se aplicarían en Secundaria el próximo curso, aunque con algunas limitaciones, pero las 23 en Primaria no serían realidad hasta el 2026/27.
También salen peor parados los mayores de 55 años, que con el nuevo acuerdo verían reducida su jornada dos horas (de 55 a 60 años) o cuatro (a partir de 60 años). En cambio, STEA resalta que en el anterior acuerdo había más tramos (de 57 a 60 años, 3 horas menos en Secundaria y 4 menos en Primaria) y de 61 en adelante en Primaria se rebajaban 5 horas en lugar de 4.
El sindicato STEA incide en que la reducción a 23 y 18 horas que debería entrar en vigor en septiembre, según lo pactado en 2022, es una demanda histórica que los docentes llevan reclamando desde hace más de una década. Con el fin de disponer de más tiempo para preparar las clases y tutorías o atender a la diversidad del alumnado, por lo que STEA enmarca la decisión del Ejecutivo PP-Vox de paralizarla dentro de “una política de ataque contra la enseñanza pública”. Junto a otras actuaciones como la subida de las ratios o la supresión de los maestros de apoyo. Igualmente, supone una reducción de cupos de docentes en los centros, horas que los centros tendrán que cubrir con recursos propios.
STEA ha afeado al Gobierno de Azcón y a las tres formaciones sindicales con representación en la Mesa Sectorial de Educación que han ratificado este acuerdo “que la cruda realidad no es lo que nos venden”.
Como primera medida de protesta, los representantes del sindicato se han concentrado hoy a la entrada de la sede del Gobierno de Aragón, en el Edificio Pignatelli, y llevarán a cabo nuevas movilizaciones en próximas fechas.
FUENTE: Nota de Prensa Sindicato de Trabajadoras/es de la Enseñanza de Aragón (STEA)
